El balance de la primera semana tras la orden de paralización de los sectores no esenciales de nuestra economía por parte del Gobierno del Estado se ha saldado con el continuo intento por parte de la patronal con el respaldo del PNV, de mantener en marcha el máximo de empresas posibles para garantizar sus beneficios a costa de poner en riesgo no solo la salud de trabajadoras y trabajadores sino la del conjunto de la sociedad.
La respuesta agresiva y fuera de tono tanto de Confebask como de los principales portavoces del Gobierno Vasco a la medida de paralización de actividades no esenciales han puesto de manifiesto para el conjunto de nuestro pueblo que para patronal y PNV, los intereses del capital están por encima de nuestras vidas.
Lejos de quedarse en manifestar su opinión contraria a la medida tomada para garantizar el control de la expansión del virus y la salud de la clase trabajadora, la patronal con el respaldo del PNV se puesto en marcha durante esta semana para buscar todos los resquicios legales posibles para mantener la actividad en las máximas empresas posibles. Así, a pesar de que el Gobierno Central aprobó paralizar toda actividad no esencial a partir del pasado lunes 30 de Marzo, el Gobierno Vasco está respaldando la continuidad de la actividad ordinaria en multitud de empresas con el argumento de que una parte de su producción provee a empresas de sectores esenciales. A su vez los proveedores de estas empresas que cerraron el pasado lunes han ido llamando a las plantillas al trabajo durante la semana con la misma argumentación.
El Partido Comunista de Euskadi-EPK ha manifestado su más firme repulsa a la actitud irresponsable de muchos empresarios que han hecho, y están haciendo, un uso fraudulento de los llamados ERTE y que han optado en el sector servicios por la vía fácil, el despido masivo como respuesta a la incertidumbre generada en el contexto actual a pesar de las herramientas puestas en marcha por el Gobierno para evitar despidos y mantener los empleos.
Así mismo la organización comunista ha condenado la acción de las mutuas de salud laboral que están dando de manera arbitraria el alta médica a personas que estaban de baja previamente por accidentes de trabajo o enfermedades profesionales dejando en la indefensión a cientos de trabajadoras y trabajadores tal y como ha denunciado el sindicato de clase CCOO de Euskadi.
Mientras el Gobierno de coalición en Madrid anunciaba hoy sábado 4 de Abril, dos semanas más de confinamiento como medida incuestionable para combatir a la pandemia que tantas vidas está segando, patronal y Gobierno Vasco se empeñan en defender los intereses del capital aunque sea a costa de la salud de la clase trabajadora y arriesgando la vida de miles de personas.
El PCE-EPK ha condenado la actitud y prácticas que están manteniendo tanto Patronal como Gobierno Vasco y PNV ante esta crisis sanitaria. El Secretario General del PCE-EPK, Jon Hernández ha manifestado que “en un momento donde cientos de miles de trabajadores de la sanidad y otros sectores esenciales hacen una sobre esfuerzo arriesgando su propia salud, donde millones de personas se mantienen en sus casas respetando el confinamiento para evitar la propagación de la pandemia y donde el conjunto de la sociedad sufre las consecuencias sanitarias y sociales de esta grave crisis, el Partido Comunista seguirá combatiendo a quienes ponen sus intereses particulares por encima del interés general”.
Finalmente Hernández ha mostrado “la solidaridad incondicional del Partido Comunista con los trabajadores y las trabajadoras de la sanidad pública, de las residencias de mayores, del transporte, del sector alimentario y de todo el resto de ámbitos económicos esenciales que no se han podido parar para poder garantizar los servicios y el abastecimiento básicos del conjunto de la población. “La clase trabajadora, con su trabajo y su solidaridad, una vez más, está poniendo de manifiesto que es el verdadero pilar de la vida en su conjunto y el motor insustituible en la lucha por un mundo mejor” ha concluido.
