La coalición insta a Gogora a culminar las labores de investigación e identificación de los restos, y a retirar la cruz franquista contraria a la memoria democrática, especialmente si se confirma la inviabilidad técnica de exhumar los restos de las víctimas del golpe allí depositadas.
Elkarrekin Podemos-IU ha registrado una Proposición No de Ley con la que plantea que la Comisión de Derechos Humanos, Igualdad y Justicia aborde la adecuada dignificación de la fosa común ubicada en el cementerio municipal de Polloe en Donostia.
Según recuerda en su escrito el parlamentario de la coalición y SG del PCE-EPK, Jon Hernández, en este cementerio “existe un panteón de propiedad municipal levantado tras el golpe fascista de 1936 por las autoridades franquistas para honrar a los soldados participes del levantamiento. Dicho panteón fue sufragado por el Ayuntamiento de Donostia con cargo al presupuesto extraordinario del Movimiento Nacional. Como es ya conocido, se inhumaron en el mismo panteón los cuerpos de milicianos republicanos. Recientemente se ha comenzado la investigación para identificar los restos de las y los milicianos republicanos que pudieran estar en dicho panteón y se ha procedido a colocar una placa en recuerdo de los ya identificados”.
Sin embargo, subraya Hernández, “sobre el panteón existe una cruz levantada en honor a los falangistas y golpistas de 1936, por lo que tiene en este caso un carácter simbólico de vinculación al régimen dictatorial que basaba sus bases en el llamado nacional-catolicismo, trascendiendo la mera simbología religiosa”. “Muchos de los milicianos allí inhumados pertenecían a organizaciones políticas y sindicales como el Partido Comunista ( PCE-EPK ), la CNT (anarquista) o la UGT, por lo que dicha cruz no es compatible con el respeto a la memoria de estas personas que dieron su vida en defensa de la democracia y las libertades, plantando cara al golpe”, añade.
Teniendo en cuenta que en dicho mausoleo se encuentran los restos de falangistas y franquistas en cuyo honor fue levantado el conjunto monumental y tumba, cree necesario en virtud de la nueva Ley de Memoria Histórica acordada entre esta formación y el Gobierno Vasco “estudiar la exhumación de los restos de los milicianos y establecer la posibilidad de que sean inhumados en otro lugar y no junto a sus verdugos, según sea la voluntad de sus familiares, y en su caso organizaciones políticas y sindicales de pertenencia de las víctimas”.
Por todo ello, Elkarrekin Podemos-IU propone que el Parlamento Vasco inste al Instituto de la Memoria, la convivencia y los Derechos Humanos, Gogora, así como al Ayuntamiento de Donostia, “a dignificar y resignificar adecuadamente la fosa común ubicada en el panteón municipal de origen franquista, como lugar de la Memoria Histórica a través de una adecuada señalización y visibilización de la misma, y a proceder a la retirada de la cruz ubicada sobre el panteón por tratarse en este caso de un símbolo de enaltecimiento de los golpistas”.
Asimismo, reclama que esta Cámara inste a Gogora “a culminar las labores de investigación e identificación de los restos, y a elaborar un informe que determine definitivamente si es posible técnicamente proceder a la exhumación de los restos de las víctimas del golpe allí depositadas”.