El Secretario General del PCE-EPK, Jon Hernández, ha transmitido el respaldo a la jornada de movilización convocada hoy en Euskadi por el 85% de la representación sindical del sector público –ELA, LAB, CCOO, STEILAS, SATSE y ESK– ante la alta temporalidad y el progresivo deterioro de las condiciones del trabajo y de la calidad en los servicios. “Vivimos un continuo proceso de deterioro de los servicios públicos en Euskadi como consecuencia de las políticas de privatización que ha impulsado durante años el PNV con la colaboración del PSE bajo el eufemismo de la colaboración público-privada. Su modelo de gestión se ha basado en el adelgazamiento de lo público para engordar a una parte del sector privado que vive a costa de contratas, adjudicaciones y conciertos públicos”, ha afirmado Jon Hernández.
A juicio del cabeza de lista de Sumar por Araba, esta nueva jornada de huelga responde “a la incapacidad del PNV y PSE para negociar con las centrales sindicales, y a que sus políticas de concertación privada han ido desgastando no sólo las condiciones de trabajo las empleadas y los empleados públicos, sino también la calidad del servicio público que se presta a la ciudadanía”.
De este modo, Jon Hernández ha manifestado que la convocatoria de huelga supone “un rechazo frontal a las políticas de subcontratación practicadas por los distintos gobiernos del PNV y PSE que afectan a las de 100.000 trabajadores y trabajadoras se encuentran en constante conflicto con las empresas ante progresivo deterioro de sus condiciones de trabajo”. Mientras tanto, ha recordado Hernández “la temporalidad de las plantillas públicas alcanza en Euskadi el 40% del total de asalariados y asalariadas del sector público. Esta cifra está muy por encima de la mayoría de Comunidades Autónomas y de la temporalidad en el ámbito privado, lo que sitúa a Euskadi como la región europea con más temporalidad en el sector público”.
Asimismo, el candidato de Sumar ha señalado que tanto las empleadas y los empleados públicos como la ciudadanía tienen derecho a mostrar su descontento con un modelo privatizador que “ha llevado a las empleadas y empleados públicos a una pérdida del 20% en el poder adquisitivo, mientras se acumulan los convenios sin renovar como en el caso de Osakidetza donde las y los trabajadores llevan más de una década sin renovación del acuerdo regulador de sus condiciones laborales, y la ciudadanía sufre las consecuencias del deterioro de un servicio público tan esencial como la sanidad pública”.
En definitiva, “PNV y PSE dejan un sector público débil que no ha afianzado el empleo, que permite la prestación de multitud de servicios públicos por parte de empresas privadas que buscan hacer caja con lo público, un bien que es de todas y todos y que debemos defender”, ha señalado Jon Hernández.