El secretario general del PCE, Enrique Santiago, advierte de las consecuencias medioambientales, de seguridad y para la paz que conlleva el mantenimiento en Navarra de esta infraestructura militar.
Un año más, y ya van 34 marchas, cientos de personas se desplazaron el 2 de junio de diferentes territorios hasta el paraje navarro de Bardenas Reales para exigir el desmantelamiento el polígono de tiro que el Ministerio de Defensa tiene ubicado en esta zona.
Este polígono, que abarca un terreno de 2.222 hectáreas y fue implantado por el régimen franquista en 1951, es el único campo de tiro aéreo del que dispone el Ejército español y la OTAN en Europa. De hecho, aunque es utilizado mayoritariamente por el Ejército del Aire español, puede ser empleado por cualquier Estado de la OTAN, algo que sobre todo ocurre en tiempo de guerra, intensificándose su uso en días y noches previas a los bombardeos que estos países llevan a cabo en las conflictos abiertos.
Entre los cientos de asistentes a la marcha se encontraban personas de diferentes plataformas, asociaciones ecologistas, antimilitaristas y militantes de partidos políticos como el PCE e Izquierda Unida, que llegados de Navarra y Aragón, participaron de manera conjunta con los compañeros y compañeras de Sumar Navarra.
Este año, a la marcha acudió el secretario general del PCE, Enrique Santiago, quien aseguró que el polígono es un auténtico “despropósito” y recordó que desde hace años Izquierda Unida viene denunciando esta situación. Afirmó, además, que actualmente, desde el grupo parlamentario de Sumar, se llevan adelante multitud de iniciativas para lograr el desmantelamiento de la infraestructura militar.
En ese sentido, destacó que “desde el punto de vista de la seguridad de las personas” es “insostenible” que en una zona que recibe visitas permanentes de turistas y de personas que residen y trabajan en el entorno, se encuentre ubicado “el mayor polígono de tiro de la OTAN en Europa”.
Además, agregó que aparte de la “agresión” al medio que supone las operaciones de bombardeo, se desconocen las consecuencias de los residuos que están dejando estas operaciones militares. “Nadie ha informado si son residuos contaminantes, que pueden contaminar el aire, contaminar los pueblos del entorno o contaminar el agua”, concluyó Enrique Santiago.
Industria armamentística. También quiso referirse a las consecuencias geoestratégicas que conlleva el mantenimiento del polígono de tiro. “No podemos hacer que el desarrollo económico español se fíe al desarrollo de la industria armamentística”, advirtió, recordando que en las Bardenas Reales se están probando armas para impulsar esa industria armamentística. Armamento, del que, además, se desconoce su uso en las conflictos abiertos en la actualidad, o, concluyó el secretario general del PCE, “si se está utilizando por Israel en el genocidio que está cometiendo en Gaza”.
Por su parte, el coordinador de Izquierda Unida de Navarra, Carlos Guzmán, denunció que es “inconcebible” que en unas tierras como las navarras se ensayen las guerras que llevan “el hambre, la muerte y la miseria” a otras partes del planeta. Navarra “es una tierra de paz”, aseguró, recordando que en el referéndum sobre la OTAN, «en Navarra salió mayoritariamente el no». Por todo esto, el también candidato de Sumar en las elecciones al Parlamento europeo reclamó el desmantelamiento del polígono de tiro de las Bardenas.
Pasado y futuro. Se da la circunstancia de que la pasada semana, la ministra de Defensa, Margarita Robles, aseguró que no se va a cerrar el polígono de tiro porque es «necesario» para la defensa nacional, y ha rechazado que se «compren voluntades» de los ‘congozantes’ (los pueblos y entidades propietarias del terreno).
Cabe recordar que los convenios entre el Ministerio de Defensa, el Gobierno de Navarra y los ayuntamientos de los pueblos de la zona se han ido sucediendo cada cierto tiempo. Así, el último acuerdo para el arrendamiento de estos terrenos se formalizó el 2 de diciembre de 2008, con una vigencia que se extiende hasta el año 2028.
Los 19 ayuntamientos (Tudela, Arguedas, Valtierra, Caderita, Caparroso, Carcastillo, Buñuel, Cabanillas, Mélida, Villafranca, Corella, Milagro, Fustiñana, Santacara, Cortes, Marcilla, Peralta, Funes y Falces), 2 valles (Roncal y Salazar) y el Monasterio de la Oliva, reciben 14 millones de euros al año desde 2018, el doble de lo que el Ministerio de Defensa ofrecía hasta entonces.
Actividad militar. En lo que va de año, y según la información que traslada el propio Ministerio de Defensa, ya son cinco las ocasiones en que el Ejército del Aire ha realizado maniobras en la zona. En total, han sido 27 los días en que los aviones han llevado a cabo maniobras de tiro y bombardeo en Bardenas Reales (5 en mayo, 10 en abril, 4 en marzo y 8 en febrero), algunos de ellos con presencia de aviones europeos de la OTAN. Esta reciente actividad supone que, casi con seguridad, 2024 acabará siendo el año en que más bombardeos de este tipo se realicen en esta década.
